Vinos Corcovo, el sabor de Valdepeñas que emerge desde la profundidad
Dentro de la Denominación de Origen Valdepeñas de vinos de España, destacan bodegas que han visto recompensado su trabajo con numerosos premios de carácter internacional, nacional y regional como pueden ser los vinos de Bodegas J.A. Megía e hijos que comercializa sus caldos bajo la marca Corcovo.
La bodega, con más de 90 hectáreas de viñedo propio, destaca por el encanto del conjunto. Pero si algo hay que remarcar, además del esplendoroso edificio principal que data del año 1884, es su inmejorable nave de crianza. Situada a 13 metros de profundidad excavada en la roca, otorga al lugar donde envejecen los vinos unas condiciones excepcionales tanto de humedad como de temperatura, además de constantes durante todo el año, creando así unos vinos que merece la pena probar. Una cueva para emborracharse de aromas de gran intensidad a madera y a caldos en maceración que consiguen despertar aún más las ganas de degustar buen vino.
Una presentación de vanguardia y una inmejorable relación calidad-precio, son las claves con las que esta marca de vinos haya alcanzado una buena posición en el mercado. Produce una amplia colección de productos, entre los que destacan el Verdejo 2011 y el tinto Syrah, ambos premiados en premios Gran Selección de Castilla-La Mancha.
Sobre el Corcovo Verdejo, un blanco indicado especialmente para pescados y mariscos además de carnes frías, la crítica coincide en designarlo como un vino con una gran intensidad olfativa, suave y con reminiscencias a frutas tropicales dotado de un final persistente. Por su parte el Syrah, de intenso color granate y aroma de frutos rojos es denominado como un vino sabroso y con un armonioso final. Se trata de vinos monovarietales a los que hay que sumar la serie limitada que lleva por nombre 24 barricas con vinos de estas dos variedades.
A ellos hay que sumar una variedad de vinos entre los que podemos encontrar el blanco Airen, el rosado Syrah tempranillo, Corcovo Roble tempranillo, Reserva y Crianza tempranillo. Una variedad que muestra el buen hacer de esta empresa familiar que ha logrado impulsar su marca hasta lo más alto gracias a la perfecta conjunción de modernidad y tradición. Modernidad en su imagen y técnicas de producción, y tradición por la arraigada cultura vinícola de la zona.
Y es que la historia de los vinos de Valdepeñas se remonta a los siglos IV-VI a.C. ya que en el yacimiento íbero situado junto a la ciudad existen vestigios que denotan una producción vitivinícola, aunque fue en el siglo XIII de nuestra era cuando el área de Valdepeñas llegó a ser una de las más importantes áreas de producción de vino suministrando al Califato de Toledo. La fama de estos vinos continuó su propagación ya en la corte de Madrid a partir del siglo XVI, y la construcción del ferrocarril en el siglo XIX constituyó un gran impulso para la industria vitivinícola valdepeñera. Fue en 1932 cuando se recogió el denominado Estatuto del Viñedo, la primera ley reguladora del sector vitivinícola que surgía en España, dando como resultado una de las primeras zonas en constituir una Denominación de Origen que protege la producción de vino.
Valdepeñas es la segunda Denominación de Origen española en cuanto a volumen de ventas por detrás de Rioja, la D.O. Valdepeñas se ha convertido en sinónimo de calidad y buenos vinos. A nivel nacional e internacional se reconocen los vinos de esta denominación cuyos viñedos se localizan en el sur de la provincia de Ciudad Real.
Y dentro de esta Denominación de Origen, a la que están adscritas más de 40 bodegas de gran importancia, podemos encontrar vinos elaborados con diferentes variedades, siendo la Airén y la Cencibel o tempranillo las más comunes a pesar de que más recientemente se han unido variedades como Verdejo, Chardonnay, Sauvignon blanc, Merlot, Sirah o Petit Verdot. De estas variedades y gracias al clima y al tipo de suelo se obtienen vinos de gran calidad blancos, tintos, jóvenes, fermentados en barrica, rosados, de maceración carbónica, dulces…
En definitiva, una denominación, unos caldos, unos aromas y unas deliciosas sensaciones que bien merecen la pena hacer una escapada a esta zona vinícola de España.