Un verano de tentaciones sin salir de la ciudad
El calor, la playa, una cena especial con el sonido de la brisa marina de fondo, torrarse al sol… Así es el verano deseado para muchos. Para otros, o no lo es tanto o no tienen la suerte o el tiempo para poder escapar de la ciudad. Pero tranquilos, divertirse en la ciudad con el termómetro superando los 35ºC sin derretirse es posible. Les mostramos cómo con esta guía de planes que hoy les proponemos.
Un chapuzón a varios metros de altura
Algunos hoteles ofrecen la posibilidad de pasar las olas de calor dentro de una piscina a varios metros de altura con las mejores vistas de la ciudad, como:
Gran Meliá Palacio de los Duques (Madrid)
Erigido en lo que antiguamente era un Palacio del siglo XIX en el Madrid de los Austrias, muy cercano al Palacio Real, el Teatro Real y la Catedral de la Almudena, el Gran Meliá Palacio de los Duques está inspirado en la obra de Velázquez. Su piscina y jacuzzi, situadas en el ático, ofrecen unas vistas panorámicas del Palacio Real, la Catedral de la Almudena y el barrio de los Austrias, todo ello acompañado de una zona solárium y un cocktail bar. Además, puedes relajarte paseando por su increíble jardín jardín histórico de 1000 m² y finalizar la velada en su wellness center Thai Room, con todo tipo de masajes y tratamientos.
Hotel Emperador (Madrid)
La piscina de este hotel madrileño la encontramos en la décima planta, todo un santuario urbano de relax desde el que poder disfrutar del skyline de la capital. El hotel Emperador Madrid pone a disposición de sus clientes un solarium, zonas de acceso chillout, restaurante snack bar y la posibilidad de pedir una cama balinesa. Además, ofrecen la posibilidad de reservar la terraza para organizar barbacoas inolvidables, rodeados de amigos y haciendo del verano algo único. Abierta de 10 a 21h todos los días entre mayo y septiembre, para poder disfrutar al máximo del sol de Madrid.
Dear Hotel (Madrid)
El Dear Hotel propone la experiencia más completa si se quiere disfrutar de las mejores vistas de la capital: poder hacerlo a 360ºC. Sin restricciones. Desde su planta 14, el hotel ofrece unas espectaculares vistas del centro de la ciudad, el Palacio Real y la Casa de Campo. Una terraza panorámica en la que encontramos su sky pool, una piscina en el cielo. Nunca mejor dicho. Se puede degustar su cocina cosmopolita en un ambiente en el que se respira el lujo y su cocina actual, con una amplia oferta de cócteles y copas los fines de semana, en las que el DJ pone las notas musicales a estos momentos únicos. Así es el Nice to meet you Restaurant & Lounge.
Hotel Índigo (Madrid)
La terraza de verano del Hotel Índigo, en pleno corazón de Gran Vía, ha sido creada por la arquitecta Teresa Sapey. Situada en la duodécima plante del hotel, el Sky Lounge es uno de los mejores rincones donde refrescarse y disfrutar del skyline de Madrid. Aquí no es escapa ningún detalle, y el color lo inunda todo para convertir la terraza en un bosque artificial que le hará olvidar su estancia en la ciudad y adentrarse en un ambiente inigualable. En pleno corazón del bosque se encuentra la infinity pool, de uso exclusivo para los clientes más atrevidos, ya que su cercanía al borde del edificio puede resultar un poco vertiginosa. Y por si buscaban más, siempre pueden descender una planta y pasar un agradable rato en su bar, donde los mejores cocteleros se asegurarán de poner en su mano nuevas experiencias.
Hotel Mercer (Sevilla)
Andalucía y costa no siempre son sinónimos, y eso es algo que los sevillanos conocen bien. Pero si va a visitar Sevilla y quiere refugiarse del calor, no hay mejor opción que la que ofrece el hotel de lujo El Mercer. Esta cadena de hoteles de 5 estrellas inaugura su nueva joya, situado en un lugar privilegiado en pleno corazón del casco histórico, cerca de la Plaza Nueva y el Plaza de Toros de la Maestranza. Este hotel recoge el duende de Sevilla en una terraza en su azotea donde sus huéspedes pueden dar una tregua al calor en su piscina o acudir al solárium.
Hotel Atrio (Extremadura)
En Extremadura podemos ponernos el traje de baño en la terraza de este hotel, un edifico anclado en el pasado con una estética vanguardista y moderna. Su arquitectura transmite la cercanía que se respira entre el hotel y sus alrededores, la naturaleza, y en su interior encontramos lugares tan mágicos como su terraza y su restaurante. Jugando con las texturas, la luz y los colores, alojarse en este hotel es una experiencia similar a la de visitar una obra de arte. Desde su terraza se puede admirar el casco histórico de la ciudad con las montañas como fondo mientras nos damos un baño en su espectacular piscina. En su patio abierto y su jardín podemos relajarnos y siempre queda la posibilidad de visitar las obras de arte pictórico repartidas por el edificio, con pinturas de Andy Warhol, Antonio Saura o Thomas Ruff, entre otros.
Disfrute como en la gran pantalla
¿Quién no ha soñado nunca con poder ser como los personajes de Grease y acudir con el coche a ver las mejores películas al aire libre? Pues ahora es posible, porque la oferta de cines de verano en la ciudad es muy amplia y para todos los gustos.
En Madrid, por ejemplo, el parque Tierno Galván lleva a cabo el Cine in the park, un ciclo de cine musical para ver Grease como sus personajes o la mágica La La Land. Por su parte, el ciclo de cine de La Galería de Cristal del Palacio de Cibeles permite ver de nuevo grandes clásicos en la gran pantalla mientras disfruta y admira el increíble edificio. En Toledo, ciudad imperial, podemos ver los mejores estrenos en el Auditorio Parque de las tres culturas. Si nos acercamos al norte, Pamplona cuenta con cines de verano para todos los públicos, con sesiones de entrada libre. En Logroño el precio por asistir a la proyección son 5 euros, aunque por 15 euros se puede disfrutar del bono «cine de verano», en el que se incluyen una botella de vino y dos entradas. Por su parte, Zaragoza también se suma a la moda de proyectar las novedades cinematográficas.
Al calor de la buena música
Un verano no sería lo mismo sin bailar “la canción del verano”, porque los mejores momentos están siempre acompañados de grandes bandas sonoras. ¿Y qué mejor que disfrutar al completo de la música y de un plan con amigos? Los festivales son la mejor opción para los amantes de la fiesta y disfrutar del baile. Nosotros proponemos acudir a Los veranos de la villa en la capital, con decenas de actividades (muchas de ellas gratuitas) y actuaciones de grandes artistas en distintos puntos de Madrid. O al Festival de Música DCODE que el 9 de septiembre tomará la Ciudad Universitaria. Un festival de música indie, rock y algunos toques de electrónica. En esta edición estarán Franz Ferdinand, Liam Gallagher, Interpol, Band Of Horses o The Kooks, entre otros.
Esté donde esté, los festivales llaman a su puerta, ya se en la zona de El Merediz (Cangas de Onís, Asturias) con el Aquasella entre el 20 y el 23 de julio, o en el Puerto de Cádiz con No sin música, en las mismas fechas. Contempopránea se encarga de llevar a Albuquerque (Badajoz) la mejor música y el Low Festival en Benidorm a los mejores artistas. Otras citas que no se pueden perder son: Sonorama (Aranda del Duero, Burgos), Tomorrowland en Barcelona, Arenal Sound en Burriana (Castellón) o el Dreambeach en Villaricos (Almería).
Empaparse de cultura
Aburrirse en verano no es una posibilidad. Siempre se puede aprovechar la oportunidad de tener más tiempo libre para visitar los museos de la ciudad y acudir en los días con precio reducido o, incluso, gratuitos. Y no sólo los museos y centros de cultura ofertan exposiciones permanentes, sino que existe un amplio catálogo de cultura con el que empaparnos estas vacaciones.
En el Museo Thyssen-Bornemisza, en Madrid, encontramos la exposición dedicada a El Renacimiento en Venecia. Triunfo de la belleza y destrucción de la pintura, toda una selección de 89 obras maestras de la pintura veneciana del siglo XVI de artistas como Tiziano, Tintoretto, Veronés o Lott. Sin salir de la capital se pueden ver una selección de tesoros traída del British Museum en el espacio CaixaForum en ¡Agón! La competición en la antigua Grecia, un acercamiento a los griegos para entender su lucha y competitividad constante como un valor honorable. Hasta el 27 de agosto se puede acudir a la Sede de PHotoESPAÑA y visitar El festival internacional de fotografía y artes visuales en su XX edición, una cita a la que los apasionados de la fotografía no pueden faltar. 100 exposiciones con obras de 514 artistas y un programa de 20 actividades profesionales en 62 sedes, hasta el 27 de agosto.
La capital no es la única que alberga una amplia oferta de cultura. Sevilla no tiene nada que envidiarle con su exposición Sorolla. Un jardín para pintar, en el CaixaForum, en la que se ve la evolución del pintor valenciano en el diseño de su propio jardín, un espacio que mandó construir en 1910 para sí mismo, influenciado por los jardines andaluces del Alcázar de Sevilla o el de la Alhambra de Granada, entre otros.
En Cuéllar, Segovia no pueden dejar pasar Reconciliare, una exposición de arte sacro repartida en tres templos emblemáticos de la región como son la iglesia de San Andrés, la iglesia de San Martín y la iglesia de Esteban, en la XXII edición de esta exposición, organizada por Las Edades del Hombre.
Una piscina (de bolas) contra la nostalgia
Si las propuestas anteriores se le quedan cortas y lo que busca es un plan más original, tenemos la respuesta: un parque de bolas. Pero no en exclusiva para sus hijos, no, ¡para usted! Ahora puede recordar esas tardes de cumpleaños bajo las bolas y los toboganes cuando era pequeño y volver a vivir la experiencia solo, con amigos o con sus propios hijos. RivasMax Park (Rivas-Vaciamadrid, Madrid) hace realidad su sueño y pone a su disposición su piscina de bolas, siempre bajo reserva y para grupos.
Nuevas experiencias a la mesa
Y como no podía ser de otra manera, el broche final lo ponemos sentados a la mesa. Cuidarse y mantener la línea se pone más difícil en verano, pero por suerte, contamos con una cocina muy especial que comienza a hacerse popular: la cocina crudivegana o raw food (comida cruda). Los seguidores de esta cocina buscan alimentarse con productos crudos o que hayan sido expuestos a unos 40ºC (la misma que puede producir el Sol).
El primer restaurante que abrió sus puertas ofreciendo este tipo de comida en España y Europa fue Crucina, en Madrid. También podemos acercarnos a probar la carta del Botanique, también en Madrid y donde el 80% de su oferta está sin cocinar. La experiencia se puede disfrutar en Barcelona, en The Blue Project, dentro de una fundación de arte contemporáneo del Born, Väcka, o en Espai Kru, del que ya les hablamos; y en las islas tenemos a Ziva to Go (Mallorca).
Ya sea ponerse a remojo, acudir a exposiciones, ir al cine de una forma diferente o probar nuevas experiencias gastronómicas, hacer del verano un momento único tan sólo depende de nosotros. Y puede hacerse sin ir a la playa, demostrado.