Montblanc Heritage Spirit Orbis Terrarum: la tierra al alcance de tu mano
La representación del mundo visto desde el Polo Norte en la caja del Montblanc Heritage Spirit Orbis Terrarum sin duda atrae a primera vista, o como mínimo no deja indiferente. Pero detrás de un diseño atractivo y tan peculiar hay una compleja maquinaria diseñada para mostrarnos de un vistazo dónde es de día o de noche y facilitarnos simultáneamente la hora en dos lugares distintos de nuestro bello planeta. Una complicación relojera que convierte a este guardatiempos en un buen compañero para los amantes de los viajes.
El espíritu de la pluma legendaria Montblanc Meisterstück lanzada en 1924, y con motivo del 90 aniversario, ha sido el punto de partida para la creación de una nueva colección de relojes en la casa suiza a la que pertenece el modelo que aquí nos ocupa. La colección bajo el nombre de Heritage Spirit consiste en una gama de piezas de excelente mecánica, diseños exquisitos y con una relación calidad precio difícil de igualar. Y entre todos sus modelos, es precisamente el Orbis Terrarum uno de los más seductores. Refinado y elegante, aún con un diseño poco sencillo a cuatro tonalidades y el dibujo del globo terráqueo. Un reloj de estilo informal y alejado de la sobriedad clásica, pero de una apariencia impecable por lo que también es apropiado para las ocasiones formales.
Su nombre Orbis Terrarum es el término en latín de «tierra» y «mundo». Una denominación perfecta para un reloj que adopta un enfoque universal. Da la hora en las 24 zonas horarias del mundo gracias a una complicación desarrollada por los relojeros de Montblanc.
La función WorldTimer es su principal baza. Indica la hora en los 24 husos horarios en un despliegue práctico y de fácil legibilidad ya que la hora en la que estemos se lee en las manecillas y la hora de origen en el disco exterior de 24 horas. Además es un reloj intuitivo y sencillo de usar. Su funcionamiento es el siguiente: para tener la hora en origen, hay que colocar la ciudad en cuestión a las 6 horas, para después, mediante la corona, ajustar las manecillas horarias a la hora en cuestión. Cuando estemos de viaje, la nueva hora se ajusta con el pulsador situado a las 8h. Con cada pulsación el reloj va cambiando las manecillas horarias hasta llegar al nuevo huso. Según vayamos viajando cambiaremos esa hora, mientras que la de casa permanecerá siempre ajustada en la posición de las 6h y el disco exterior a su paso por esa posición mostrará la hora en origen.
Esta simultaneidad horaria es posible gracias a una complicación de nuevo cuño desarrollada por la relojera suiza. Pero ¿cómo funciona exactamente esta complicación?
Mediante un dial construido en varias capas. Bajo el cristal de zafiro, en el núcleo de la caja los océanos se muestran en un primer disco en un color azul claro. Los continentes en el dial principal se muestran, a su vez, bajo relieve en dos colores, blanco para el día y en un bonito azul oscuro para la noche. Este dial va girando con el movimiento de las horas para pasar de la noche al día cada punto geográfico. Rodea el planisferio un disco con los nombres de 24 ciudades que representan los diferentes husos horarios. Y para terminar, en el disco exterior se sitúan las 24 horas que nos reporta la hora de origen y la hora en el resto de husos horarios.
Todo ello en una caja de 41 mm de diámetro y 12 mm de altura y en dos versiones: acero u oro rosa. Y para la correa también dos opciones: cocodrilo color negro o acero. Su precio es su otro gran atractivo, la versión en acero y correa de cocodrilo, son 4.990 euros.
En resumen, el Montblanc Heritage Spirit Orbis Terrarum, homenajeando al globo terráqueo, es un reloj cosmopolita que permite la convivencia de los 24 husos horarios y que además refleja una impecable artesanía relojera suiza. Un reloj que bien podría estar dedicado a los viajeros más experimentados.