Ya puedes llegar a los barrios más en alza de Copenhague en metro (además de en bici)
Copenhague estrenó en septiembre una nueva línea de metro, la City Circle Line, que abre el acceso a algunos de los lugares más interesantes que localizados en los nuevos barrios que marcan tendencia en la capital danesa: Østerbro, Nørrebro, Frederiksberg y Vesterbro. Hemos hablado con la comandante Stridh de SAS para que, ya sea que estés planeando tu primer viaje a esta ciudad escandinava o regreses por segunda o tercera vez, conozcas qué vale la pena visitar en esos cuatro vecindarios y cómo llegar desde la nueva parada de metro más cercana -si es que no te aninas a imitar a los locales moviéndote en bicicleta-.
La comandante de Boeing 737 con 14.000 horas de vuelo, estudió y se sacó la licencia de piloto privado en Estados Unidos a los 17 años. Después continuó su formación de vuelo en Estocolmo y comenzó a volar en la aerolínea doméstica sueca Linjeflyg en 1989 como primer oficial en un Fokker F28. Después pasa a Boeing 767 y 737 como copiloto de SAS, y en 2012 asciende a capitán de 737. Nos hemos tomado un café con ella en su base de operaciones, el aeropuerto Estocolmo-Arlanda (ARN) -el más grande de Suecia y uno de los dos centros de conexión más importantes de la aerolínea escandinava- para que nos sugiera los puntos calientes en los cuatro barrios más en alza de la capital de la vecina Dinamarca (que por cierto, Copenhague es la ciudad natal de la comandante).
Recientemente clasificada como la mejor ciudad del mundo para los ciclistas, Copenhague es una ciudad notablemente fácil de “navegar” sobre dos ruedas -de hecho, hay más bicicletas que coches-.
Pero para aquellos que desconfían de sus habilidades ciclistas o que les pone nerviosos meterse con la bici entre coches, o que simplemente son más comodones, algunos de los mejores barrios de la capital danesa les han permanecido un poco fuera de su alcance. Porque sin acceso directo en metro, los viajeros tenían que caminar algo más de tres kilómetros desde el centro de la ciudad o descubrir el sistema de tranvías para llegar a lugares como Geranium, en el distrito de Østerbro, que es el único restaurante de tres estrellas Michelin en Dinamarca, o Designer Zoo, en Vesterbro, un buen lugar para empaparte de las últimas ideas del diseño danés.
Pero desde que la nueva línea City Circle Line, o M3, abrió sus puertas a finales de septiembre, los barrios de Østerbro, Vesterbro, Nørrebro y Frederiksberg están ahora conectados con el centro de la ciudad. Con 17 paradas, los viajeros pueden subirse al tren en la estación Kongens Nytorv en el centro de la ciudad y coger la línea hacia estos barrios que antes estaban alejados.
Estas son algunas de las paradas que hacer a tu paso por sus calles, según nos sugiere la capitana Marie:
Østerbro – estación de metro: Poul Henningsens Plads
Al este de la urbe, Østerbro -øst significa Este en danés- es uno de los barrios más verdes de Copenhague. Situado entre el mar y los canales, es el epicentro de un nuevo concepto urbano en el que la filosofía slow se alía con el diseño escandinavo y el entusiasmo gastronómico. De manera que aquí el viajero encuentra cafeterías sostenibles, pequeñas tiendas en las que encontrar prácticamente de todo, artesanos trabajando en sus talleres, además del parque más grande de la urbe.
Con la inauguración de la M3, Østerbro ha obtenido varias nuevas paradas de metro. Eso significa que ahora podemos llegar desde el aeropuerto en aproximadamente 20 minutos a la panadería Juno, un lugar muy concurrido que abrió en 2017 un excocinero de Noma (el restaurante más emblemático de la cocina nórdica). Aquí hay que hacerse con algunos de sus rollos de canela u hojaldres, elaborados a la vista y que se agotan rápidamente.
En la cafetería Original Coffee, que cuenta con su propio tostadero de granos de café para obtener sus mezclas, hay que subir a su terraza en el tejado -si hace buen tiempo- para degustar uno de sus cafés acompañado de alguno de los pasteles y tartas que elaboran solo con ingredientes orgánicos.
Y de cara al apetito de los viajeros pro estrellas Michelin, en este barrio se haya el único restaurante con tres de esa aclamada distinción, Geranium, del chef Rasmus Kofoed. Situado en la octava planta de un moderno edificio, puede presumir de tener además de uno de los menús degustación más exclusivos del planeta, también una de las mejores vistas de la zona este de Copenhague. Desde la estación de metro Poul Henningsens Plads, el restaurante está a sólo 10 minutos a pie en dirección sur, en un lateral del Faelledparken, el parque más grande de Copenhague.
Nørrebro – estación de metro: Nørresbros Runddel
Uno de los barrios más multiculturales de la ciudad, Nørrebro está hecho para pasearlo entreteniéndote entre la concentración de tiendecitas de decoración, galerías, ateliers de diseñadores independientes, wine bars…
Con la nueva línea de metro M3 ha obtenido cuatro nuevas paradas. Hay mucho que explorar aquí. Empieza cogiendo el metro hasta la estación de Nørresbros Runddel. Desde allí, a nueve minutos a pie tienes Bæst, un relajado restaurante italiano que elabora su propia mozzarella y embutidos. Ve con amigos y pide un par de pizzas para compartir. ¿Te apetece comer comida tailandesa con estrella Michelin? Kiin Kiin está a sólo una manzana.
La calle favorita de Marie es Jægersborggade, donde sin duda no te vas a querer perder ni un sólo detalle de las tiendas de decoración en las que adquirir esos productos que hacen que las casas danesas sean tan especiales. Curiosea también entre las joyitas en vinilo de Musiksmag y Crate – Beer and Vinyl, mientras te tomas una de sus cervezas artesanales. Para encontrar el mejor chollo en moda, el outlet de 65 metros cuadrados de la marca sueca Acne Studios. Y si lo tuyo son los vinilos, que sepas que hay al menos dos docenas de tiendas especializadas en la ciudad, ¡sólo en Nørrebro encuentras seis!
Vesterbro – estación de metro: Enghave Plads
Al prometedor vecindario de Vesterbro se llega, en metro, parando en la nueva estación de Enghave Plads. En su día fue el barrio rojo de Copenhague y todavía conserva una cierta vibración de su pasado, pero ahora es más conocido como un punto “caliente” de restaurantes.
Puede que no esperes comer comida mexicana estando en Dinamarca, pero teniendo su capital un restaurante como Sanchez, querrás hacer la caminata de ocho minutos desde la estación de Enghave Plads hasta esta alegre y divertida cantina que propone platos con el alma de la cocina mexicana pero con un giro nórdico. No dejes de pedir sus churros de canela y azúcar, sobre los que su chef, Rosio, añade un parfait de vainilla y mezcal, crema amarga y ralladura de naranja.
Vesterbro fue un barrio trabajador y un área de fábricas situada en la parte oeste de la estación central de Copenhague. Muy cerca de la estación hay varios hoteles con historia, como el Astoria, con sus aires de la era socialista y que en su día, al parecer, fue rompedor.
Hoy aquí también habitan un buen número de estudios de artistas independientes y galerías. Una parada casi ineludible para la comandante de SAS es Designer Zoo por las muestras de creatividad local que organiza. Y como además de galería es tienda, junto con ver las últimas ideas de diseño danés aprovecha para llevarte una buena adquisición (no por ello cara) de vuelta a casa.
Frederiksberg – estación de metro: Frederiksberg Allé
Las líneas de metro M1 y M2 ya cruzaban el barrio de Frederiksberg, pero ahora es mucho más fácil llegar a su esquina sureste con la reciente apertura de la estación Frederiksberg Allé en la nueva línea M3.
Esto significa que puedes caminar desde el metro hasta la panadería Hart Bageri en sólo siete minutos. Dirigida por Richard Hart, expanadero jefe de la famosa Tartine de San Francisco en California, y contando con el apoyo de René Redzepi, el chef y copropietario de Noma (al que le suministra el pan), no es de extrañar que hasta este lugar vayan a comprar el pan y pasteles todos los foodies del barrio y más allá.
Después de disfrutar de un croissant o un pastel de Richard Hart, famoso por su pan de masa madre, camina dos manzanas hacia el este hasta Falernum, un restaurante y popular lugar de reunión del vecindario para tomar una copa de vino (o tres). Después puedes quedarte a dormir en el Hotel Central, si tienes la suerte de conseguir la única habitación de este encantador hotel de una habitación situado en Frederiksberg.