Socuéllamos, la “patria del vino” de La Mancha

Es la localidad que aporta más bodegas a la recientemente creada «Ruta del Vino de La Mancha». Aquí se halla la segunda cooperativa más grande de Europa y presume de su moderno y activo Museo Torre del Vino. Socuéllamos es una ciudad que cuenta con 27.000 hectáreas de viñedos y 13 bodegas locales de diversa consideración y tamaño, lo que le ha hecho acreedor del título de “patria del vino”.

Pero no es, ni mucho menos, la única localidad que merece la pena destacar en la nueva ruta del Vino de La Mancha. Entre todas, conforman el mayor viñedo del mundo. Son Alcázar de San Juan, Campo de Criptana, El Toboso, Socuéllamos, Tomelloso (aquí se encuentra la bodega más grande de Europa) y Villarrobledo.
Los mayores productores
Pero la nueva Ruta del Vino de La Mancha tiene en Socuéllamos una de sus paradas esenciales porque muchas de sus bodegas han apostado fuerte por el enoturismo. Es el caso de las Bodegas El Refugio, cuyo gerente, Benjamín Galisteo, no entiende cómo los vinos de La Mancha no están más valorados y no forman parte, casi nunca, de la carta de vinos de los restaurantes importantes. “Somos los mayores productores del mundo y a veces tenemos que tirar por el suelo los precios debido a la gran competencia que tenemos. Pero eso no significa que los vinos sean malos, porque muchas veces vienen de Francia, Italia y el norte de España a comprar nuestras uvas y nuestros vinos”.

Haya bodegas de dimensiones impresionantes, salas de barricas ecológicas en cuevas espectaculares, bodegas tradicionales en medio de viñedos con encanto… una oferta que está abierta al público y que tiene mucho atractivo. Por eso, cuando el visitante abandona la ciudad tiene que irse con la satisfacción de haber disfrutado, aprendido y saboreado todo lo que tiene que ver con el vino y lo que le rodea. Y, si es posible, hay que probar las gachas, un plato tradicional y de origen humilde pero que gusta a todo el que lo prueba. Sólo en La Mancha se pueden probar gachas exquisitas.
El vino y su cultura
En Socuéllamos se halla la segunda bodega más grande de Europa (la primera está en Tomelloso). Se trata de la Bodega Crisve (diminutivo de Cristo de la Vega), con su tren de vendimia de uvas blancas de 500.000 kilos a la hora y tintas de 300.000 o su línea de embotellado con capacidad para 5.000 botellas por hora, por ejemplo. “Ya no es posible hablar de enoturismo sin hablar de Socuéllamos, una ciudad donde el vino y su cultura pueden percibirse en todos los rincones”, afirma la alcaldesa, Pruden Medina.

El Museo Torre del Vino de Socuéllamos es también uno de los mejores exponentes en su género en España. Además de símbolo visual de la localidad, con su torre mirador de 42 metros de altura, el museo defiende y divulga las bondades de algo tan intrínsecamente unido a la ciudad y la región como es el vino. Es un espacio abierto a la experimentación y disfrute con una temática que va desde la historia del vino y su cultivo al proceso de vinificación y los métodos de análisis del vino, pasando por otros temas vinculados a la cata, el maridaje y el disfrute responsable de esta bebida.
Fiesta de la Vendimia
No se puede salir de esta localidad sin tener las ganas de regresar a alguna de sus grandes citas festivas, como la Fiesta de la Vendimia o Manchavino, dos eventos imprescindibles para todo buen amante del vino. La Fiesta de la Vendimia se celebra durante la primera semana de septiembre en honor de la Virgen de Loreto, que, según la tradición vela por las buenas cosechas. Hay buen ambiente, animación y múltiples actividades, como el Concurso Nacional de Catadores de Vinos, el Concurso de Pisada de Uva y de Racimos, etc.
Por su parte, Manchavino está a punto de celebrar su vigésima edición con el ánimo de acercar la cultura del vino a todas las edades para poner en valor los vinos de La Mancha. Manchavino realiza numerosas actividades durante todo el año y es un vehículo de transmisión de las tradiciones vinculadas al vino. Su famoso Patio del Vino es una de las citas más populares y coincide con la Fiesta de la Vendimia. Se trata de una gran fiesta nocturna en la que la gente celebra con buen vino, buena gastronomía y buena música la nueva cosecha. Por supuesto, todos, locales y foráneos, están invitados a la fiesta.
