Ópera y zarzuela (en directo) para cenar
Regresan las ‘Cenas cantadas’ del Café de la Ópera, un restaurante que mira de frente al Teatro Real de Madrid
El restaurante El Café de la Ópera propone un menú gastronómico armonizado con un espectáculo lírico
¿Imaginas degustar unas deliciosas croquetitas de jamón ibérico, un confit de pato al horno o un bacalao guisado mientras escuchas fragmentos célebres de ‘La chulapona’, ‘La flauta mágica’, ‘Tosca’ o ‘Turandot’? Si te apasiona la lírica y quieres disfrutar de una velada divertida, atrevida y romántica, no hay nada más que ir cualquier sábado a una de las ‘Cenas cantadas’ del madrileño El Café de la Ópera.
Frente al Teatro Real
El establecimiento se encuentra en la plaza de Isabel II, frente a frente con el Teatro Real, y propone un original homenaje gastronómico que lleva el nombre de ‘La Chulapona’, como tributo a esta zarzuela en tres actos con música de Federico Moreno Torroba y que representa el casticismo madrileño. Toda una declaración de intenciones para quienes saben valorar el arte lírico y la gastronomía y quieran disfrutar de una noche de sábado única.
Las arias más célebres
Durante el espectáculo, tenores, sopranos y mezzosopranos, acompañados al piano, interpretan las melodías más célebres de la ópera y de la zarzuela a escasos metros de los comensales, mientras explican su origen y alguna que otra curiosidad sobre su creación o composición.
Menú ‘La Chulapona’
Estamos ante una velada elegante cuya propuesta gastronómica se inspira cada temporada en las óperas y zarzuelas más conocidas. El menú ‘La Chulapona’ propone un viaje que comienza con unas croquetitas de jamón ibérico con mayonesa y una crema de maíz con tierra de kikos y sésamo tostado. Después, hay un paseo por el mar con un salmón con salsa de reducción de cava, tomate semiseco y pistacho. Y se continúa la ruta con un confit de pato al horno con parmentier de patata y canela. La nota dulce la pone el postre que es marca de la casa: flan suave de queso con helado de violeta madrileña. Esta experiencia se puede disfrutar por un precio de 59€ por persona, todos los sábados a partir de las 20:30 h. Son las Cenas Cantadas, un viaje emocionante y sofisticado en un entorno tranquilo para disfrutar de una ‘noche en la ópera’ cena inolvidable.
Defensores de la zarzuela
“Defendemos la zarzuela como españoles que somos”, afirma con contundencia el director artístico del espectáculo, Manuel Ganchegui, quien ha llevado la lírica española por todo el mundo. “Todo el espectáculo gira en torno a la ópera y la zarzuela, porque quien llega a esta sala viene a escuchar y disfrutar de esta música tan nuestra”. En este sentido, añadió que “queremos poner en valor la zarzuela, un género conocido como el género chico de la lírica, cuando es igual de grande que la ópera”.
Lírica y gastronomía
En opinión de Ganchegui, la zarzuela tiene hoy su equivalente en los musicales: “Son obras con partes habladas y partes cantadas. Y son espectáculos amenos, entretenidos, ágiles y dinámicos, pero en clave de música clásica”. Por eso, dijo, desde El Café de la Ópera tuvieron la iniciativa de divulgar la lírica a través de la gastronomía, con el fin de atraer a un público más amplio y más joven.
La zarzuela, por el mundo
El propio Manuel Ganchegui nos contó que lleva en la música desde los 5 años, cuando empezó a cantar en el coro de su colegio, los Escolapios, hasta los 15 años. Después entró en un coro de zarzuela, con el que ha viajado por 57 países de todo el mundo durante los 25 años en que estuvo con esta compañía. Compartía trabajo con otras 120 personas hasta que decidió dejar la interpretación y pasarse a la producción.
Cenas románticas y pedidas de mano
Hasta que Manuel Ganchegui decidió embarcarse en El Café de la Opera. Y hasta ahora: en total, 27 años son ya los lleva abierto este local. Muchos clientes del restaurante, aproximadamente una tercera parte, son extranjeros, fundamentalmente de Suramérica, Francia y Alemania. Y llegan motivados por diversas razones. Es el espacio de muchas cenas románticas, de pedidas de mano, de celebraciones de bodas de oro o de plata, de reuniones de familia, de grupos de amigos…
Un brindis para acabar la velada
Durante la velada, el comensal aprende, de boca de los intérpretes, curiosidades, chascarrillos y aspectos desconocidos de las piezas cantadas y de sus autores. Normalmente son fragmentos célebres y conocidos por el público que se van cantando a lo largo de la velada, en una interacción cómoda con el público, con momentos divertidos y simpáticos. La velada finaliza, no podía ser de otro modo, cantando y brindando con los comensales.
www.elcafedelaopera.com