Memoria del Paladar: comerse Italia sin salir de Madrid
Los que amamos Italia a veces sentimos lo mismo que el buen Marcel con la magdalena de la tía Leoncia: basta un bocado de algún plato italiano cocinado en nuestro país para evocar nuestras rutas culinarias por la nación transalpina… ¿Quién no sueña con volver a disfrutar de aquella porchetta única, o de esa pizza tan crujiente? ¿Qué no daría yo por volver a Edy Piu y gozar con su riquísima tagliata? Hoy le proponemos revivir lo mejor de Italia sin salir de Madrid. Es la Memoria del Paladar.
Este proyecto culinario y experiencial se asienta sobre tres pilares fundamentales. El más interesante y especial son sus experiencias gastronómicas, doce paradas que se celebran los jueves en el espacio El Gusto es Nuestro y que permiten recorrer diferentes regiones italianas a través de diferentes platos típicos.
El particular Virgilio que nos acompaña en esta odisea en la que solo hay paraíso es el chef Massimo Di Cencio, jefe de cocina de la Embajada de Italia en España durante dos años y principal impulsor del proyecto. Bajo su tutela, los participantes viajarán a través de los platos por las calles y plazas de la región elegida. Además de dar buena cuenta de las recetas, los comensales, por boca de Massimo, conocerán los detalles del menú, los orígenes y curiosidades de cada uno de los platos. Y como un viaje hay que vivirlo, podrán preguntar, observar, introducirse en la cocina y participar del proceso de elaboración del menú. Una oportunidad única de descubrir el potencial gastronómico, histórico y único de un país que se extiende de norte a sur a lo largo de 1.580 kilómetros. Y qué kilómetros, ¿verdad?
Algo más que comer
La experiencia, insisten los organizadores, va más allá de servir comida italiana más o menos elaborada. El objetivo de Di Cencio es que sus invitados profundicen en la riqueza de la gastronomía de su país. ¿Sabe usted que la cocina siciliana tiene una gran influencia no solo de los romanos, sino también de los árabes? ¿Querría conocer lo apegada que está a la tierra la forma de comer y guisar en Lazio?
La próxima experiencia tendrá lugar el 15 de diciembre y nos permite desplazarnos, comida mediante, a Abruzzo, una región del centro meridional de Italia profundamente marcada por su abrupta orografía, donde solo la costa de playas y acantilados da una tregua en forma de llanuras. Es habitual aquí esquiar y disfrutar de los deportes de nieve. Frente a estos hábitos relativamente modernos, los pucheros de la comarca rebosan de tradición: se cocina ahora como antes, se respeta la esencia.
¿En qué consiste el menú para descubrir Abruzzo? Por 65 euros por persona, la cena consistirá en un entrante de quesos y embutidos, unas croquetas de patata y mozzarella y unas bolitas de queso y huevo. A continuación se servirán las crispelle mbusse, una especie de crepes que nadan en un caldo de carne. Se continúa con otro plato muy característico de esta región, los espaguetis a la guitarra (que es el instrumento con el que se corta esta particular pasta) en una salsa de tomate con albondiguitas. Unas mini brochetas de oveja y un cordero muy original son los segundos. El postre también es una receta tradicional de Abruzzo, una golosísima crostata de mermelada de uvas.
Cursos para profundizar en la cocina
Otra de las patas de esta italiana academia es la de sus cursos. Además de preparar platos italianos, el objetivo es ir más allá de las recetas, sino enseñar a los estudiantes fundamentos de la técnica y el conocimiento de los productos que se usan. La idea es profundizar en la elaboración, técnicas de conservación, preparación y corte de los alimentos, en abordar en detalle todos los alimentos, para, de esta manera, tener todas las herramientas para elaborar un plato con éxito.
Se impartirán ocho cursos, aún sin fecha programada, para grupos de entre 8 y 12 personas y la duración de cada curso será de 3 horas. Hay temáticas muy diferentes: cómo usar fondos, salsas madre, cremas y cortes aromáticos; un cursillo en profundidad sobre la carne y sus cortes, cómo limpiar y preparar pescado… Al final, claro está, se degustará todo lo preparado en una divertida cena informal.
Por último, la Memoria del Paladar funciona también como un servicio de chef privado a domicilio. El cocinero en persona se desplazará donde el comensal necesite y preparará diferentes platos, a elección del comensal, para poder dar buena cuenta de la mejor gastronomía italiana en esa ocasión especial que será mucho más que una cena o comida. Será un viaje exprés, sin aviones ni jaleos, al corazón italiano: ¡su cocina!