Joan Fontcuberta ‘dispara’ a los dinosaurios
Hasta el próximo 18 de enero, las Naves de Gamazo de Santander exhiben una selección de fotografías del artista
La exposición se centra en sus trabajos con inteligencia artificial de los últimos dos años
Artista, docente, ensayista, crítico y promotor de arte español especializado en fotografía, Joan Fontcuberta (Barcelona, 1955) es el protagonista de la exposición ‘Mirabilia’ que, hasta el próximo 18 de enero, se puede visitar en las Naves de Gamazo de Santander.
Más de medio siglo de trayectoria artística
El proyecto que el también Premio Nacional de Fotografía 1998 presenta en la capital cántabra reúne en diálogo una selección de sus trabajos recientes, varios de ellos inéditos, junto a algunas series emblemáticas anteriores. Ese recorrido, que abarca ya más de medio siglo, pretende poner de manifiesto que en su carrera existen unas líneas de investigación recurrentes a las que el artista regresa una y otra vez. Por ejemplo, el conflicto entre realidad y ficción y entre lo natural y lo artificial.
Capacidad para generar pensamiento crítico
La exposición, una de las más extensas planteadas por el autor en España, viene a confirmar que su estilo le ha convertido en uno de los artistas con mayor capacidad para generar pensamiento crítico. Desde su posición, lo fundamental no son los hechos empíricos, sino nuestra percepción y el tiempo que dedicamos a su análisis.
Desconfiar de los que dicen tener la verdad
Por eso, el propósito de Joan Fontcuberta es ponernos en alerta, enseñarnos a desconfiar de aquéllos que dicen tener la verdad. No existe la objetividad en ningún relato, parece decir, porque una imagen es una construcción manipulable. Y lo fundamental ante ellas, sugiere, es plantear interrogantes, no encontrar respuestas.
El escepticismo y la pausa como antídotos
Ya Michel de Montaigne decía que el mayor enemigo de la verdad no es la mentira, sino la ilusión de saber la verdad, aplicando a su vida el relativismo contra cualquier presunta supremacía impuesta. Por eso, ante los señuelos que tenemos ante nuestros ojos, los únicos antídotos, insiste Fontcuberta, son el escepticismo y la pausa.
Las series más emblemáticas
La extensa obra fotográfica de Joan Fontcuberta, se caracteriza por el uso de herramientas informáticas en su tratamiento y su presentación al público de manera interactiva. De hecho, su trabajo entiende la fotografía como un medio difícil de catalogar, más próximo a disciplinas vinculadas con las ideas, la sociología, la comunicación o la semiótica. La exposición de Santander, comisariada por Sema d’Acosta y organizada por Fundación Enaire y PHotoESPAÑA, contiene una selección de sus series más emblemáticas.
‘Herbarium’ (1982-1985)
Desde sus inicios, son muchos los proyectos que Fontcuberta ha desarrollado inspirados en cuestiones botánicas. Su primer catálogo de flora es un homenaje al alemán Karl Blossfeldt (1865-1932). Y en su serie ‘Herbarium’ recurre a las imágenes de este profesor germano para plantear una revisión crítica con pseudoplantas artificiales construidas a base de detritus industriales: piezas de plástico, huesos, pedazos de plantas o restos de animales que encontraba en el entorno industrial de Barcelona. Hoy, este trabajo es una de sus series más reconocibles.
‘De Rerum Natura’ (2023-24)
Una de las mejores historias naturales de las Indias es la ‘Historia del Nuevo Mundo’ (1653), escrita por el jesuita Bernabé Cobo Peralta. Y basándose en las descripciones de este libro, Fontcuberta diseñó formas vegetales inventadas con programas de visualización generativa.
‘Orogénesis’ (2002-06)
La orogénesis es la parte de la geografía física que estudia la formación del relieve y, por tanto, la aparición de montañas y valles. En este proyecto, Fontcuberta genera paisajes con programas informáticos que han sido diseñados para interpretar mapas. Para ello utiliza cuadros conocidos de la historia del arte, produciendo escenas realistas sin referentes geográficos. En esta serie, aparecen tribus urbanas, almas marginales, inadaptados o lisiados, junto a una flora inverosímil de belleza rara y excéntrica. En definitiva, los extravíos sociales frente a la armonía de una naturaleza colorista.
‘Orquídeas y macarras’ (2024-2025)
Las orquídeas, plantas que tienen una gran diversidad morfológica, han cautivado a botánicos y aficionados a la floricultura durante siglos. Fontcuberta pone de relieve su compleja relación con los polinizadores, que a menudo involucra mecanismos de engaño visual. Y su estudio se basa en su capacidad de seducir por los ojos al igual que hace la fotografía.
‘Los Viajes extraordinarios’ (2025)
Las ediciones originales de los ‘Viajes extraordinarios’ iban ilustradas con más de 4.000 grabados, una exuberancia gráfica que indica hasta qué punto la fantasía de Julio Verne se despliega en su discurso literario. El célebre escritor francés fue también un creador audiovisual y eso se comprueba porque muchos de sus relatos han pasado fácilmente a formato cinematográfico. Hoy disponemos de la Inteligencia Artificial, que comparte con Verne el espíritu de anticipación y síntesis. Y Fontcuberta ha querido reinterpretar a Verne con la magia de la IA generativa.
‘Dinosaurios en Palacio’ (2025)
Esta serie se desarrolla en el Palacio de Fernán Núñez de Madrid, un edificio emblemático en cuyos suntuosos salones se celebraron algunas de las mejores fiestas de la alta sociedad española del siglo XIX. Fueron famosos sus bailes y celebraciones, a los que acudían la reina Isabel II y su corte, la alta nobleza, políticos y artistas de renombre. Aquí los protagonistas son unos aristocráticos dinosaurios. Así, se generan un encuentro disruptivo entre un espacio versallesco y estos seres extraordinarios que sólo existen en nuestra imaginación.
‘Génesis.IA’ (2025)
El primer libro de la Biblia, el Génesis, transcribe los pasos que Dios emprendió para crear el mundo y la primera pareja de seres humanos alojados en el Paraíso. La videoinstalación ‘Génesis.IA’ muestra imágenes de lo que podría ser el surgimiento de la luz y la oscuridad hasta llegar a los majestuosos paisajes del Edén. Al entrar en la sala, los visitantes escuchan, desde una serie de altavoces, la voz de Joan Fontcuberta sintetizada recitando un ‘loop’ con versículos del Antiguo Testamento en 12 idiomas que se superponen evocando el efecto bíblico de la Torre de Babel.
