Islas Cook: la aislada belleza tropical

Vamos con una de geografía: ¿Dónde están las Islas Cook? ¿Podría situarlas en el mapa? ¿A qué país pertenecen? En efecto: están entre Hawai y Nueva Zelanda (de hecho mantiene una libre asociación con este país) y es un paraíso tropical al que deseará escaparse estas Navidades… o en cualquier otro momento. En este artículo queremos tentarle a que se deje seducir por este aislado archipiélago del Pacífico Sur de playas increíbles y naturaleza desbordante.

 

En este pequeño paraíso, la playa está por todas partes.
En este pequeño paraíso, la playa está por todas partes.

 

Air New Zealand nos conecta con estas deliciosas islas. Hay que tener en cuenta que el viaje es largo, así que si dispone de presupuesto, ir en Business es buena idea. Ofrece a sus pasajeros un check-in Premium y kits de aseo hechos a base de ingredientes orgánicos y embalaje reciclado, que, curiosamente, puede reutilizar como adaptador para el iPad. Lo mejor son, sin duda, sus lujosos sillones de cuero con reposapiés otomano. En la vigilia son un comodísimo asiento; a la hora de dormir, se convierten en una mullida cama con su propia almohada de algodón, edredón y sábana. Y si somos gourmet, durante el vuelo se puede disfrutar de una cena en la cabina Business Premier preparada personalmente por un chef a bordo.

El aeropuerto internacional se encuentra en la isla de Rarotonga, donde se encuentra la capital (Avarua) y que también es la mayor y más poblada. Con un perímetro de 32 kilómetros, realmente no resulta difícil de recorrer. En cuanto al alojamiento, la mejor opción es optar por el impresionante Pacific Resort Rarotonga, con 64 habitaciones, villas y suites de 4 estrellas en torno a Muri, una de las muchas lagunas naturales que hay en la isla. Es el punto de partida perfecto para explorar la isla, en el que numerosos sistemas montañosos, selváticos, están rodeados de playas de blanca arena, perfectas para dejarse llevar por la pereza o practicar deportes acuáticos… Nosotros somos más de lo segundo que de lo primero. La isla vive del turismo pero aún posee una belleza virgen: ¡ni siquiera hay un McDonald’s! En cualquier caso, el país es muy seguro. Este año, además, se han introducido cuatro nuevas y lujosas visitas guiadas privadas por la isla. De hecho, se ofrece la posibilidad de hacer estos tours en español para ofrecer una forma cómoda y más personalizada de descubrir la isla.

Si le gusta la joyería, en Rarotonga debe conocer Moana Gems. Sus dueños, Jackie y Raymond, renovaron en 1999 un antiguo café y junto a familias locales dedicadas a esta industria, cultivan exquisitas perlas en la laguna de Manihiki. Con ellas elaboran piezas de joyería de peculiar belleza, entre las que sobresalen las perlas negras, las más características de la isla. Las exponen en una joyería que antaño fue un café. Son auténticos apasionados de las perlas, así que no dude en preguntarles cualquier duda.

 

Rarotonga alberga la capital y es la isla más grande de Islas Cook.
Rarotonga alberga la capital y es la isla más grande de Islas Cook.

 

Islotes, un lago y el encanto turquesa de Aitutaki

A 225 kilómetros de Rarotonga (45 minutos de vuelo) se encuentra el atolón de Aitutaki, el segundo más visitado y que alberga en su interior la laguna más famosa del país, de un hipnótico color turquesa. Salpicada de islotes (motus), Aitutaki es el destino perfecto para los amantes de los deportes acuáticos y del submarinismo, ya que sus islotes coralinos y sus playas son el hogar y refugio de numerosas especies de peces tropicales. Merece la pena hacer un pequeño crucero y pasar el día en uno de sus motus, idílicos y salvajes. Y pasear, claro está, por la principal villa de la isla, Arutanga.

 

Una idílica playa de Aitutaki, la segunda isla más poblada de Islas Cook.
Una idílica playa de Aitutaki, la segunda isla más poblada de Islas Cook.

 

En Aitutaki se encuentra Etu Moana, uno de los hoteles más lujosos del país. Comprometido con el entorno y la población, sus villas están construidas con materiales naturales, como las hojas de palma, que se emplean para los techos. El agua caliente se obtiene con energía solar e incluso recogen y aprovechan el agua de lluvia, de alta calidad. Con vistas a la laguna, presumen de no tener canales de televisión (aunque sí ofrecen una selección de películas), es el enclave ideal si busca algo eco-romántico.

 

Los locales tienen fama de ser muy buenos anfitriones y amables.
Los locales tienen fama de ser muy buenos anfitriones y amables.

 

En cualquier isla que usted visite debe prestar especial atención a la cocina de corte polinesio. Junto a opciones continentales de buffets, pizzas o hamburguesas, la pesca es uno de los oficios más asentados en el archipiélago y el pescado y los mariscos son fuente principal de su recetario. Pruebe el delicioso ka mata (pescado crudo marinado) o el Kai UMU, cocinado en un horno de tierra tradicional. En los mercados callejeros es típico comer el pescado frito acompañado de patatas. Las frutas tropicales, que exportan, son también deliciosas y una forma lujuriosa de conseguir nuestra dosis de vitaminas. También hay restaurantes más lujosos, si la ocasión lo merece.

¿Se viene con nosotros al paraíso?

 

Guardar

Guardar

Guardar

Guardar

Guardar

Guardar

Guardar

Guardar

Rosalía Martínez

Aunque mi nombre es Rosalía Martínez, todo el mundo me conoce como Piti. Periodista gastronómica de profesión, tengo igual de inquietos el espíritu y el paladar, así que me apasiona viajar y descubrir sitios fantásticos para comer. Y contarlo y recomendar, claro. Epicúrea convencida. Cuando no como o viajo, leo y veo series.

Un comentario

Botón volver arriba