Ibiza, un destino soñado para disfrutar

Ibiza, a la que se le conoce popularmente como ‘la isla blanca’, es el paraíso para diferentes tipos de viajeros, ya sean famosos, hippies, fiesteros, parejas enamoradas o familias con niños que buscan una escapada tranquila y de relax en un destino para disfrutar que ofrece todo y para todos

Ibiza, esta encantadora isla volcánica, es un destino soñado para disfrutar con los cinco sentidos. Y, aunque ha sido mundialmente reconocida por la fiesta interminable, también oculta ciudades antiguas, playas increíbles y una deliciosa gastronomía mediterránea.

Dónde alojarse

El lugar ideal para alojarse en Ibiza depende del tipo de viaje que se ande buscando. Ibiza ciudad es perfecta para disfrutar de la cultura, la gastronomía, el ocio nocturno, así como el lujo y el ambiente LGTBQIA.

En este sentido, Figueretas es el emplazamiento ideal para quienes buscan un estar cerca de la capital, pero a un coste más económico, y Playa d’en Bossa destaca por la fiesta nocturna. San Antonio ofrece un poco de todo y cuenta con precios bastante asequibles, tanto para el alojamiento, como para la comida o bebida. Por su parte, Santa Eulalia es la zona más tranquila de la isla, ideal para familias, personas mayores o simplemente aquellos que prefieren conocer Ibiza de una forma más tranquila y relajada.

Para buscar donde dormir en alguna de estas ubicaciones, una buena idea es echar un vistazo  a los alojamientos que se localizan en Blauparchotels.com, ya que esta plataforma cuenta con apartamentos y hoteles repartidos por toda la isla que se adaptan a todo tipo de turistas, perfectos para parejas, familias o grupos de amigos.

Playas y calas

Con 210 km de costa, las playas y calas ibicencas, son los mayores atractivos de la isla. Las hay de todo tipo: bulliciosas, escondidas, familiares, de arena fina, de cantos y rocas… Algunas de las que reciben una mayor puntuación por turistas y expertos del sector del turismo son Cala Salada, Cala Saladeta, Cala Conta o Cala Bassa, con aguas de azules turquesa que impresionan y un excelente estado de conservación. Las más animadas y concurridas son Las Salinas y Playa d’en Bossa.

Gastronomía

Los platos y cartas de los negocios de restauración en Ibiza, como no podía ser de otra manera, toman como protagonistas los productos del mar y del interior isleño, con recetas tradicionales que han pasado de generación en generación, y otras que han adoptado las influencias de las diferentes culturas que han dejado su huella en la isla. Sana, sabrosa, original y con profundas raíces son los calificativos que mejor la definen.

Entre los platos más típicos destacan el sofrit pagès, el arroz de matanzas, el guisat de peix, la coca de pimientos o la tonyina a la ibicenca. En cuanto a la repostería, además del famoso «flaó», no hay que dejar de probar las orelletes y los buñuelos.

Ibiza, Patrimonio de la Humanidad

En Ibiza, son visitas obligadas la Catedral, la Plaza de la Vila, la Iglesia de Santo Domingo, el Ayuntamiento, así como recorrer las calles adoquinadas que se encuentran dentro de la muralla renacentista, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Para los amantes de la cultura y la arqueología, se recomienda visitar la necrópolis de Puig des Molins, cementerio durante la época de los fenicios, los púnicos y los romanos, declarada también Patrimonio de la Humanidad. Necrópolis conformada por un conjunto de cuevas que acogen más de 4.000 hipogeos (tumbas) y ajuares con centenares de figuras hechas de barro cocido.

Fiesta y vida nocturna

Reclamo turístico para los más jóvenes, la Isla Blanca presume de ser uno de los más destacados destinos de fiesta a nivel internacional, especialmente la zona de la capital y Sant Antoni. Son mundialmente conocidas sus discotecas y clubs, como Pacha, Privilege, Ushuaïa, Space Of Sound, Es Paradise, Dc10 (antiguo Studio18) o Amnesia, a los que asisten los DJs más prestigiosos del panorama internacional desde abril hasta octubre, que son los meses de la temporada fiestera.