Semana Santa: pasos de exquisita gastronomía en España

La Semana Santa puede ser, para muchos, una época de recogimiento y devoción. Para todos, en cualquier caso, son días que invitan a disfrutar de excelentes platos. Potajes de vigilia, torrijas de toda clase y condición, monas… Hoy queremos invitarles a viajar por los mejores sabores de esta época en nuestro país. Póngase el capirote y acompáñenos por esta ruta por el mejor yantar patrio.

Madrid

La capital tiene algunas procesiones interesantes, pero el impacto gastronómico de la Semana Santa es aún más rico en los restaurantes madrileños. Muchos de ellos aprovechan estas fiestas para introducir platos típicos como potajes o torrijas. Hemos buceado por las propuestas ad hoc más apetitosas. Destacamos la de un nuevo restaurante que ha triunfado con su fusión japo-mediterránea en pocos meses de vida hasta erigirse como un imprescindible. En Bacira (Castillo 16), un local que ha triunfado en pocos meses de vida, ofrecen entre las sugerencias del día un guiso tradicional de garbanzos con espinacas y su sustancia, un taco de bacalao confitado a baja temperatura con crema de espinacas y una golosa torrija caramelizada con sopa de lemongrass y helado de canela.

Para los que busquen algo un poco más clásico recomendamos Los Galayos (Botoneras 5), justo al lado de la Plaza Mayor. Para la Semana Santa han confeccionado un menú con muchas propuestas de primeros y segundos, como el potaje de vigilia con pelotas de arroz, unas carrilleras de bacalao de las islas Feroe confitadas sobre pesto rojo o la torrija abizcochada con Pedro Ximénez.

Barcelona

EL destino perfecto para los más golosos. Y sin duda, estos tienen que visitar alguna de las tres tiendas de Pastelería Escribà. El repostero más conocido del país es un artista del chocolate y consigue espectaculares figuras. No en vano, sus monas de Pascua están siempre entre las más celebradas de la capital catalana por lo espectacular de sus elaboraciones. Si tiene que impresionar a algún niño, o usted mismo es goloso y le gusta esta simpática tradición, no lo dude: acertará.

Valencia

Valencia tiene una rica tradición dulcera durante la Cuaresma y la Semana Santa. Monas de Pascua, tortas, el famoso panquemado (que recuerda al roscón de Reyes en sabor), el arnadí… para degustarlos todos es una muy buena idea ir a La Rosa de Jericó, (Hernán Cortés 14), uno de las mejores hornos de la ciudad. El escaparate de estos días, tomado por dinosaurios de chocolate, es digno de verse.

Sevilla

La ciudad tiene una antiquísima y muy rica tradición gastronómica. Las torrijas (en este caso de miel, sobre un particular pan de “molde”), el potaje de vigilia y el bacalao en todas sus formas son los reyes de los fogones en estas fechas. Le damos dos direcciones para salados y golosos. Una es Casa Ricardo (Hernán Cortés 2): si no es de la ciudad y quiere ver lo que es el ambiente cofrade, acuda a esta castiza casa de comidas en pleno centro. Son muy famosas sus croquetas de jamón, que en estas fechas también hacen de bacalao. También es conveniente pedir el potaje o las pavías, sabiamente fritas. Insistimos: como se vive aquí la Semana Santa no se vive en ningún sitio.

Otro clásico es Ochoa (Sierpes 25). Esta cafetería y obrador lleva endulzando a los hispalenses desde 2010 gracias a sus exquisitos hojaldres (probablemente los mejores de la ciudad) y pasteles. En Semana Santa es obligatorio probar alguna de sus torrijas (con miel, insistimos) en el tradicional salón de la calle Sierpes (aunque tienen otra cafetería en el barrio de Los Remedios, si os viene mejor). Durante todo el año hacen exquisitos batidos de helado (la redacción recomienda el de fresa) y unos bizcochitos llamados americanos muy peculiares.

Zaragoza

La ciudad se ha esforzado en los últimos años por promocionar su rica Semana Santa, muy ligada a la gastronomía. De hecho, este año 29 restaurantes se han unido en Gastropasión, un festival en el que, hasta el 5 de abril, se ofrecen diferentes menús para probar los platos más cofrades. Mucho bacalao, congrio, torrijas y arroz con leche por 20, 25 o 30 euros el menú completo con bebida incluida.

Málaga

Sus tronos y la implicación de sus gentes han hecho de la capital de la Costa del Sol un destino imprescindible para cualquiera que desee acercarse a la mejor Semana Santa. Durante estas fechas la ciudad es un hervidero de sabrosas propuestas culinarias. Nosotros le recomendamos una visita fugaz a El Pimpi (Granada 62), tal vez la más popular de la ciudad. Además de la bodega-bar cuenta con un espacio gastronómico donde hacen menús con maridaje, catas, cursos… En esta época le recomendamos su ensalada malagueña con salmorejo, naranja y bacalao asado, pura esencia cofrade y “boquerona”.

Murcia

En la ciudad, y en toda la región, es muy habitual degustar durante estos días la mona de Pascua (no confundir con las de chocolate), un bollito tipo brioche que se corona con un huevo cocido. Es habitual que los padrinos y madrinas se lo regalen a sus ahijados. Si quiere probarlos, le recomendamos que se pase por la Pastelería Bonache (Plaza de las Flores 8), una de las más antiguas de la ciudad.

Palma de Mallorca

Los afortunados que recalen en la isla durante estas fechas deben saber que aquí es tradicional consumir durante estos días empanadas (panades) de carne y guisantes (pèsols) que pueden adquirirse en muchos hornos. En la capital hay algunos excelentes, donde además de la tradicional ensaimada se pueden saborear estas “santas” especialidades. Nosotros le recomendamos visitar el Forn de San Agustín (Av. Joan Miró 354) y la Pastelería Viñaza (Vinyassa 1).